De bajos vuelos

El aeropuerto de Logroño-Agoncillo no está pasando por sus mejores momentos, el anuncio del cese de actividades de la compañía Rioja Airlines ha dejado a las instalaciones aeropuertuarias riojanas en una delicada situación.

Hasta la creación de esta infraestructura, los riojanos teníamos que trasladarnos hasta Vitoria, Bilbao o Pamplona para poder coger un avión. El aeropuerto de Agoncillo, demandado hace muchos años, con su inauguración se convirtió en un juguete para grandes y medianos empresarios riojanos, y como no, para el Ejecutivo regional.

Mientras los "hombres y mujeres" de la región podían viajar en "primera clase" y por "altos vuelos". Los riojanos, que carecen de movilidad propia, se las ven y se las desean para una cosa tan sencilla como "ir al médico a la capital".

Aeropuerto, sí, pero también servicios para las personas de un "pelaje modesto", porque nuestros gobernantes, gobiernan para todos, no solamente para empresarios/as y hombres y muejeres de negocios.